El hombre que lisonjea á su prójimo, Red tiende delante de sus pasos.
Otro parece en los labios al que aborrece; Mas en su interior pone engaño. Cuando hablare amigablemente, no le creas; Porque siete abominaciones hay en su corazón. Encúbrese el odio con disimulo; Mas su malicia será descubierta en la congregación. El que cavare sima, caerá en ella: Y el que revuelva la piedra, á él volverá. La falsa lengua atormenta al que aborrece: Y la boca lisonjera hace resbaladero.
No haré ahora acepción de personas, Ni usaré con hombre de lisonjeros títulos. Porque no sé hablar lisonjas: De otra manera en breve mi Hacedor me consuma.
El que reprende al hombre, hallará después mayor gracia Que el que lisonjea con la lengua.
PORQUE, hermanos, vosotros mismos sabéis que nuestra entrada á vosotros no fué vana: Pues aun habiendo padecido antes, y sido afrentados en Filipos, como sabéis, tuvimos denuedo en Dios nuestro para anunciaros el evangelio de Dios con gran combate. Porque nuestra exhortación no fué de error, ni de inmundicia, ni por engaño; Sino según fuimos aprobados de Dios para que se nos encargase el evangelio, así hablamos; no como los que agradan á los hombres, sino á Dios, el cual prueba nuestros corazones. Porque nunca fuimos lisonjeros en la palabra, como sabéis, ni tocados de avaricia; Dios es testigo; Ni buscamos de los hombres gloria, ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo. Antes fuimos blandos entre vosotros como la que cría, que regala á sus hijos: Tan amadores de vosotros, que quisiéramos entregaros no sólo el evangelio de Dios, mas aun nuestras propias almas; porque nos erais carísimos. Porque ya, hermanos, os acordáis de nuestro trabajo y fatiga: que trabajando de noche y de día por no ser gravosos á ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios. Vosotros sois testigos, y Dios, de cuán santa y justa é irreprensiblemente nos condujimos con vosotros que creísteis:...
Porque no hay en su boca rectitud: Sus entrañas son pravedades; Sepulcro abierto su garganta: Con su lengua lisonjearán.
Estos son murmuradores, querellosos, andando según sus deseos; y su boca habla cosas soberbias, teniendo en admiración las personas por causa del provecho.
Destruirá Jehová todos los labios lisonjeros, La lengua que habla grandezas,
Fieles son las heridas del que ama; Pero importunos los besos del que aborrece.