Ensancha el sitio de tu cabaña, y las cortinas de tus tiendas sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y fortifica tus estacas.
Y el que da simiente al que siembra, también dará pan para comer, y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los crecimientos de los frutos de vuestra justicia;
Y Jabes fué más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes, diciendo: Por cuanto le parí en dolor. E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: Oh si me dieras bendición, y ensancharas mi término, y si tu mano fuera conmigo, y me libraras de mal, que no me dañe! E hizo Dios que le viniese lo que pidió.
Acrecentará Jehová bendición sobre vosotros; Sobre vosotros y sobre vuestros hijos. Benditos vosotros de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra.
Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida, y rebosando darán en vuestro seno: porque con la misma medida que midiereis, os será vuelto á medir.
Traed todos los diezmos al alfolí, y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y vaciaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.
Y sembró Isaac en aquella tierra, y halló aquel año ciento por uno: y bendíjole Jehová.
Les dijo también: Mirad lo que oís: con la medida que medís, os medirán otros, y será añadido á vosotros los que oís.
Por el camino de tus mandamientos correré, Cuando ensanchares mi corazón.
Y será que antes que clamen, responderé yo; aun estando ellos hablando, yo habré oído.
A Jehová empresta el que da al pobre, Y él le dará su paga.
Ensanchaste mis pasos debajo de mí, Y no titubearon mis rodillas.
No debáis á nadie nada, sino amaros unos á otros; porque el que ama al prójimo, cumplió la ley. Porque: No adulterarás; no matarás; no hurtarás; no dirás falso testimonio; no codiciarás: y si hay algún otro mandamiento, en esta sentencia se comprende sumariamente: Amarás á tu prójimo como á ti mismo. La caridad no hace mal al prójimo: así que, el cumplimento de la ley es la caridad.
Tú ensanchaste mis pasos debajo de mí, Para que no titubeasen mis rodillas.
Jehová Dios de vuestros padres añada sobre vosotros como sois mil veces, y os bendiga, como os ha prometido!
Nuestros graneros llenos, provistos de toda suerte de grano; Nuestros ganados, que paran á millares y diez millares en nuestras plazas:
A él conviene crecer, mas á mí menguar.
Y á Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos ó entendemos, por la potencia que obra en nosotros,
Honra á Jehová de tu sustancia, Y de las primicias de todos tus frutos; Y serán llenas tus trojes con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto.
Y respondiendo su señor, le dijo: Malo y negligente siervo, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí; Por tanto te convenía dar mi dinero á los banqueros, y viniendo yo, hubiera recibido lo que es mío con usura. Quitadle pues el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. Porque á cualquiera que tuviere, le será dado, y tendrá más; y al que no tuviere, aun lo que tiene le será quitado. Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera: allí será el lloro y el crujir de dientes.
Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán término, sobre el trono de David, y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.