Yo reprendo y castigo á todos los que amo: sé pues celoso, y arrepiéntete.
Porque yo les doy testimonio que tienen celo de Dios, mas no conforme á ciencia.
En el cuidado no perezosos; ardientes en espíritu; sirviendo al Señor;
Que se dió á sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
Mi celo me ha consumido; Porque mis enemigos se olvidaron de tus palabras.
Pues de justicia se vistió como de loriga, con capacete de salud en su cabeza: y vistióse de vestido de venganza por vestidura, y cubrióse de celo como de manto,