¿Qué Dice la Biblia?

Cuidar de Sí Mismo

1 Corintios 6:19-20 / RVR

¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque comprados sois por precio: glorificad pues á Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.

3 Juan 1:2 / RVR

Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas cosas, y que tengas salud, así como tu alma está en prosperidad.

1 Corintios 3:16 / RVR

¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?

1 Corintios 3:17 / RVR

Si alguno violare el templo de Dios, Dios destruirá al tal: porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.

Salmos 139:13-14 / RVR

Porque tú poseiste mis riñones; Cubrísteme en el vientre de mi madre. Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras: Estoy maravillado, Y mi alma lo conoce mucho.

Romanos 12:1-2 / RVR

ASI que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable á Dios, que es vuestro racional culto. Y no os conforméis á este siglo; mas reformaos por la renovación de vuestro entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

1 Pedro 5:7-9 / RVR

Echando toda vuestra solicitud en él, porque él tiene cuidado de vosotros. Sed templados, y velad; porque vuestro adversario el diablo, cual león rugiente, anda alrededor buscando á quien devore: Al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que las mismas aflicciones han de ser cumplidas en la compañía de vuestros hermanos que están en el mundo.

1 Corintios 10:31 / RVR

Si pues coméis, ó bebéis, ó hacéis otra cosa, haced lo todo á gloria de Dios.

1 Pedro 3:1-22 / RVR

ASIMISMO vosotras, mujeres, sed sujetas á vuestros maridos; para que también los que no creen á la palabra, sean ganados sin palabra por la conversación de sus mujeres, Considerando vuestra casta conversación, que es en temor. El adorno de las cuales no sea exterior con encrespamiento del cabello, y atavío de oro, ni en compostura de ropas; Sino el hombre del corazón que está encubierto, en incorruptible ornato de espíritu agradable y pacífico, lo cual es de grande estima delante de Dios. Porque así también se ataviaban en el tiempo antiguo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios, siendo sujetas á sus maridos: Como Sara obedecía á Abraham, llamándole señor; de la cual vosotras sois hechas hijas, haciendo bien, y no sois espantadas de ningún pavor. Vosotros maridos, semejantemente, habitad con ellas según ciencia, dando honor á la mujer como á vaso más frágil, y como á herederas juntamente de la gracia de la vida; para que vuestras oraciones no sean impedidas. Y finalmente, sed todos de un mismo corazón, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; No volviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino antes por el contrario, bendiciendo; sabiendo que vosotros sois llamados para que poseáis bendición en herencia. Porque El que quiere amar la vida, Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen engaño;...

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