Come, hijo mío, de la miel, porque es buena, Y del panal dulce á tu paladar:
¿Hallaste la miel? come lo que te basta; No sea que te hartes de ella, y la vomites.
Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se transfigura en ángel de luz.
Mas él respondiendo, dijo: Escrito está: No con solo el pan vivirá el hombre, mas con toda palabra que sale de la boca de Dios.