Mas Jehová hizo levantar un gran viento en la mar, é hízose una tan gran tempestad en la mar, que pensóse se rompería la nave.
El fuego y el granizo, la nieve y el vapor, El viento de tempestad que ejecuta su palabra;
Y Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías hartará tu alma, y engordará tus huesos; y serán como huerta de riego, y como manadero de aguas, cuyas aguas nunca faltan.
Jehová es tardo para la ira, y grande en poder, y no tendrá al culpado por inocente. Jehová marcha entre la tempestad y turbión, y las nubes son el polvo de sus pies.
Y Samuel clamó á Jehová; y Jehová dió truenos y aguas en aquel día; y todo el pueblo temió en gran manera á Jehová y á Samuel.
Formó, pues, Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra, y alentó en su nariz soplo de vida; y fué el hombre en alma viviente.