El que detiene el castigo, á su hijo aborrece: Mas el que lo ama, madruga á castigarlo.
La vara y la corrección dan sabiduría: Mas el muchacho consentido avergonzará á su madre.
Mas el Consolador, el Espíritu Santo, al cual el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todas las cosas que os he dicho.
Y vosotros, padres, no provoquéis á ira á vuestros hijos; sino fhhijos; sino fh amonestación del Señor.
BETH. ¿Con qué limpiará el joven su camino? Con guardar tu palabra.
Echando toda vuestra solicitud en él, porque él tiene cuidado de vosotros.