Oirá el sabio, y aumentará el saber; Y el entendido adquirirá consejo;
Oye, hijo mío, la doctrina de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre: Porque adorno de gracia serán á tu cabeza, Y collares á tu cuello.
Como zarcillo de oro y joyel de oro fino, Es el que reprende al sabio que tiene oído dócil.