ES pues la fe la sustancia de las cosas que se esperan, la demostración de las cosas que no se ven.
Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello; pues haciendo esto, á ti mismo salvarás y á los que te oyeren.
Porque ninguna cosa es imposible para Dios.
De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.
Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos.
Por tanto tú te has engrandecido, Jehová Dios: por cuanto no hay como tú, ni hay Dios fuera de ti, conforme á todo lo que hemos oído con nuestros oídos.
Tú le hiciste un poco menor que los ángeles, Coronástele de gloria y de honra, Y pusístete sobre las obras de tus manos;
Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
HERMANOS míos, no os hagáis muchos maestros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.
Respondió Jesús, y díjole: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos á él, y haremos con él morada.
Al Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce: mas vosotros le conocéis; porque está con vosotros, y será en vosotros.