Los pensamientos son frustrados donde no hay consejo; Mas en la multitud de consejeros se afirman.
Encomienda á Jehová tus obras, Y tus pensamientos serán afirmados.
Ea ahora, los que decís: Hoy y mañana iremos á tal ciudad, y estaremos allá un año, y compraremos mercadería, y ganaremos: Y no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es un vapor que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece. En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quisiere, y si viviéremos, haremos esto ó aquello. Mas ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala. El pecado, pues, está en aquel que sabe hacer lo bueno, y no lo hace.
El corazón del hombre piensa su camino: Mas Jehová endereza sus pasos.
Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que salieses de la matriz te santifiqué, te dí por profeta á las gentes.
DEL hombre son las disposiciones del corazón: Mas de Jehová la respuesta de la lengua.
Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es ordenar sus pasos.