No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
El solamente es mi fuerte, y mi salud; Es mi refugio, no resbalaré mucho.
Y á Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos ó entendemos, por la potencia que obra en nosotros,
El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias;
Fiel es Dios, por el cual sois llamados á la participación de su Hijo Jesucristo nuestro Señor.
Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.