No nos cansemos, pues, de hacer bien; que á su tiempo segaremos, si no hubiéremos desmayado.
Porque ninguna cosa es imposible para Dios.
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.
Esforzaos empero vosotros, y no desfallezcan vuestras manos; que salario hay para vuestra obra.
Y sabemos que á los que á Dios aman, todas las cosas les ayudan á bien, es á saber, á los que conforme al propósito son llamados.
Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo; porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
Y mirándo los Jesús, les dijo: Para con los hombres imposible es esto; mas para con Dios todo es posible.
Y hablóles Jesús otra vez, diciendo: Yo soy la luz del mundo: el que me sigue, no andará en tinieblas, mas tendrá la lumbre de la vida.
No temas, que yo soy contigo; no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
POR lo cual teniendo nosotros esta administración según la misericordia que hemos alcanzado, no desmayamos;
Hierro con hierro se aguza; Y el hombre aguza el rostro de su amigo.
Cuando los caminos del hombre son agradables á Jehová, Aun á sus enemigos pacificará con él.
Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente: no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios será contigo en donde quiera que fueres.
Empero sin fe es imposible agradar á Dios; porque es menester que el que á Dios se allega, crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Mas él conoció mi camino: Probaráme, y saldré como oro.
Mas el que tuviere bienes de este mundo, y viere á su hermano tener necesidad, y le cerrare sus entrañas, ¿cómo está el amor de Dios en él?
POR tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea, corramos con paciencia la carrera que nos es propuesta, Puestos los ojos en al autor y consumador de la fe, en Jesús; el cual, habiéndole sido propuesto gozo, sufrió la cruz, menospreciando la vergüenza, y sentóse á la diestra del trono de Dios. Reducid pues á vuestro pensameinto á aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, porque no os fatiguéis en vuestros ánimos desmayando.
Salmo de David. DISPUTA, oh Jehová, con los que contra mí contienden; Pelea con los que me combaten. Echa mano al escudo y al pavés, Y levántate en mi ayuda. Y saca la lanza, cierra contra mis perseguidores; Di á mi alma: Yo soy tu salud.
Airaos, y no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo;
Reducid pues á vuestro pensameinto á aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, porque no os fatiguéis en vuestros ánimos desmayando.