Tuya es, oh Jehová, la magnificencia, y el poder, y la gloria, la victoria, y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas. Tuyo, oh Jehová, es el reino, y la altura sobre todos los que están por cabeza. Las riquezas y la gloria están delante de ti, y tú señoreas á todos: y en tu mano está la potencia y la fortaleza, y en tu mano la grandeza y fuerza de todas las cosas.
Y nuestro Dios está en los cielos: Todo lo que quiso ha hecho.
El corazón del hombre piensa su camino: Mas Jehová endereza sus pasos.
Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti.
Acordaos de las cosas pasadas desde el siglo; porque yo soy Dios, y no hay más Dios, y nada hay á mí semejante; Que anuncio lo por venir desde el principio, y desde antiguo lo que aun no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quisiere;
Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; Mas el consejo de Jehová permanecerá.
Jehová afirmó en los cielos su trono; Y su reino domina sobre todos.
Y sabemos que á los que á Dios aman, todas las cosas les ayudan á bien, es á saber, á los que conforme al propósito son llamados.
En él digo, en quien asimismo tuvimos suerte, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el consejo de su voluntad, Para que seamos para alabanza de su gloria, nosotros que antes esperamos en Cristo.
¿Quién será aquel que diga, que vino algo que el Señor no mandó?
¿O no tiene potestad el alfarero para hacer de la misma masa un vaso para honra, y otro para vergüenza?
Me dirás pues: ¿Por qué, pues, se enoja? porque ¿quién resistirá á su voluntad? Mas antes, oh hombre, ¿quién eres tú, para que alterques con Dios? Dirá el vaso de barro al que le labró: ¿Por qué me has hecho tal?
De manera que del que quiere tiene misericordia; y al que quiere, endurece.
Todas las cosas ha hecho Jehová por sí mismo, Y aun al impío para el día malo.
Que formo la luz y crío las tinieblas, que hago la paz y crío el mal. Yo Jehová que hago todo esto.
Todo lo que quiso Jehová, ha hecho En los cielos y en la tierra, en las mares y en todos los abismos.
En él digo, en quien asimismo tuvimos suerte, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el consejo de su voluntad,
La suerte se echa en el seno: Mas de Jehová es el juicio de ella.