3Y en esto sabemos que nosotros le hemos conocido, si guardamos sus mandamientos. 4El que dice, Yo le he conocido, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y no hay verdad en él; 5Mas el que guarda su palabra, la caridad de Dios está verdaderamente perfecta en él: por esto sabemos que estamos en él. 6El que dice que está en él, debe andar como él anduvo.
7Hermanos, no os escribo mandamiento nuevo, sino el mandamiento antiguo que habéis tenido desde el principio: el mandamiento antiguo es la palabra que habéis oído desde el principio. 8Otra vez os escribo un mandamiento nuevo, que es verdadero en él y en vosotros; porque las tinieblas son pasadas, y la verdadera luz ya alumbra. 9El que dice que está en luz, y aborrece á su hermano, el tal aun está en tinieblas todavía. 10El que ama á su hermano, está en luz, y no hay tropiezo en él. 11Mas el que aborrece á su hermano, está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe á donde va; porque las tinieblas le han cegado los ojos.