1AMOS, haced lo que es justo y derecho con vuestros siervos, sabiendo que también vosotros tenéis amo en los cielos.
2Perseverad en oración, velando en ella con hacimiento de gracias: 3Orando también juntamente por nosotros, que el Señor nos abra la puerta de la palabra, para hablar el misterio de Cristo, por el cual aun estoy preso, 4Para que lo manifieste como me conviene hablar.
5Andad en sabiduría para con los extraños, redimiendo el tiempo. 6Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal; para que sepáis cómo os conviene responder á cada uno.
7Todos mis negocios os hará saber Tichîco, hermano amado y fiel ministro y consiervo en el Señor: 8El cual os he enviado á esto mismo, para que entienda vuestros negocios, y consuele vuestros corazones; 9Con Onésimo, amado y fiel hermano, el cual es de vosotros. Todo lo que acá pasa, os harán saber.
10Aristarchô, mi compañero en la prisión, os saluda, y Marcos, el sobrino de Bernabé (acerca del cual habéis recibido mandamientos; si fuere á vosotros, recibidle),...